lunes, 21 de diciembre de 2009

Entrevista Vieja pero Valiosa


La carrera en pleno ascenso de Mike Amigorena
Se define como un actor visceral. “Hago lo que me dice el cuerpo”, confiesa Mike Amigorena, 34 años, mendocino, y con suma habilidad para hacer teatro, cine y televisión. En el 2006, lo distinguieron todos: críticos, estudiosos y público. Por su composición del joven oligárquico de El niño argentino, de Kartún, obtuvo el ACE a la Revelación Masculina, el Premio Teatro del Mundo al mejor actor (que otorgan los especialistas del Centro Cultural Rojas de la UBA) y el Premio al Mejor Actor de la Escuela de Espectadores de Buenos Aires, que coordina Jorge Dubatti. Lo cierto es que fue una de las joyas del año. Dotó a ese chico bien, estilizado y de punta en blanco, de una soltura envidiable e intensificó la perversión, la seducción y cierta ternura sugeridas en el texto. A la vez, desplegó con sutileza y sin saturar una variedad de recursos que enriquecían su criatura: extraños sonidos guturales, algo de baile, exquisitos pasajes con guitarra y voz. “Son elementos que tengo desde chico, cuando me pasaba horas jugando solo e iba descubriendo esas posibilidades”, aclara.
Prefiere no inflar el globo y considerar el presente como el resultado de un trabajo que comenzó en el ’92, cuando dejó su ciudad natal para estudiar en Buenos Aires. Fue modelo, cadete y promotor, mientras se formaba con Doria, Fernández y Alejandro Catalán. Más tarde descubrió técnicas
como bufón, máscara neutra y clown. Y tal vez esta versatilidad le permitió componer personajes bizarros en televisión, como el hermano marciano de Una familia muy especial, y Rolando, el piloto freak de Sos mi vida. Ahora, mientras se prepara para regresar con el niño al Regina, y espera el estreno de Yo soy sola, film de Tatiana Mereñuk donde interpreta a un novio muy inseguro, participa de las grabaciones de El Capo, una tira de Telefé donde dará vida a un policía infiltrado en el seno de dos familias mafiosas, “en una cuerda distinta, más atenuada, más realista”. Igual hay espacio para su pasión: Ambulancia, una banda de música dedicada a “desfigurar géneros”, que integran otros cinco actores. Pasada la medianoche de los sábados de marzo, en Clásica y Moderna, el sexteto desplegará su propuesta. “Boys don’t Cry” en clave de funk; “Vení Raquel” a lo Spinetta Jade; “Your Love”, de The Outfields, como un valsecito; “Trigal” en ritmo pop... ¡Habrá que escucharlos!

Ambulancia stand up psicotronico

sábado, 19 de diciembre de 2009

“Nunca soñamos con tener amores tan mediáticos"




Las amigas coinciden: “Las mujeres tenemos corazones idiotas”. Así se llama la obra que protagonizan en el Paseo La Plaza: Corazón idiota. Además, las dos viven romances que dan que hablar: Siciliani con Adrián Suar, y Peterson con Mike Amigorena. Aquí, las confesiones íntimas de dos mujeres de treinta y pico.

Quiero un amor de verdad. Le temo al reloj biológico. Huelo el fracaso de esta relación. Busco a alguien que me ame como quiero que me ame. Decime cuánto te importo. Incluime en algo de tu vida. No se puede morir de amor, pero hay amores que causan grandes malestares”. ¿Ficción o realidad? ¿Telenovela rosa o compromiso profundo? ¿Planteo adolescente o desesperación a los treinta? “Hay un poco de todo esto en la vida, pero en la obra Corazón idiota tocamos los extremos”, dice Carla Peterson (35), protagonista junto a Griselda Siciliani (31). Ambas saben actuar, cantar y bailar. Y, para satisfacción de ellas y del público, es difícil adivinar cuál fue el primer camino que llevó a los otros, porque no flaquean en ninguno.


Pero hagamos un poco de historia. La rubia y la morocha se conocieron durante las grabaciones de Sos mi vida, la exitosa tira de Pol-ka. Peterson era la Constanza cruel, y Siciliani, la tontuela prima Debi (novia del personaje que interpretaba el actor Mike Amigorena, el novio de Carla en la recientísima vida real). De tanto compartir camarín, pelucas y disparates, se hicieron amigas íntimas. Una amistad verdadera, con llamados a trasnoche, consuelos en piyamas y tragos al amanecer.



–¿Nunca compiten?

Griselda: Muchos actores encaran juntos proyectos independientes, pero es más habitual que se dé entre hombres. ¿Por qué será? (risas). Entre nosotras se dio una suerte de generosidad y de compañerismo que no es habitual entre dos mujeres con egos como los nuestros. Y... ¡somos arianas!

Carla: Siempre nos ayudamos, nos damos confianza y nos complementamos. En la vida y en el trabajo.

Griselda: Hago teatro desde los 18, pero cuando tengo la suerte de encontrar un amigo en un elenco me cambia el día, la semana, la temporada...

Carla: Sabemos desde qué lugar elegimos ser actrices y todo lo que pasamos para llegar. Griselda: Es que el trabajo no es lo más importante… Yo disfruto del estrés laboral, sabiendo que después tengo mi descanso. Convengamos que no estoy cargando bolsas en el puerto: hago lo que me gusta. Y si trabajo mucho, significa que me está yendo bien.


–¿Están siempre pendientes una de la otra?

Carla: Hay momentos en que nos llamamos mucho…

Griselda: Ahora compartimos tres horas en el camarín, antes de la función. Cuando termina nos vamos a cenar. ¡Después de tres días quedamos tan agotadas que con los mensajes de texto alcanza y sobra!

Carla: Cuando tengo que tomar una decisión, a veces le pregunto qué opina. Un “¿qué te parece?” final…

Griselda: Alguna vez tuvimos algún “¡no, no, no, no hagas eso!”. ¡Menos mal!

Carla: En general, opinamos parecido. Vamos por caminos diferentes, pero hacia la misma dirección.

Griselda: En el trabajo le tuve que insistir bastante para que se animara a bailar y a cantar. Apenas la escuché, supe que cantaba súper bien.

Carla: Y a mí me dio mucho orgullo verla en La forma de las cosas, de Veronese, que era su primera obra de texto. Pero no todo es trabajar: también hacemos nuestras compritas. Y nos regalamos revistas… Disfrutamos de este tiempo de juventud, belleza y alegría. ¡Y de los bombones!

Griselda: ¡Merengues!

Carla: ¡Sex and the City! También nos juntamos por Palermo, nos visitamos en nuestras casas y sumamos a otras amigas que tenemos en común. ¡Por suerte nos tomamos vacaciones separadas!

Griselda: Ahora estamos pensando en una escapada de tres días. Hace falta cortar un poco con Buenos Aires.

–¿Escapan de las cámaras?

Carla: Trato de tomarme el revuelo mediático con humor. Ya aprendimos bastante y tenemos algunos dichos, como: “En la playa relajate, pero por las dudas siempre llevá una buena bikini”. Todavía me sorprende salir en las tapas de las revistas… Lo que más me cuesta es la historia que se arma alrededor. Pero tampoco puedo estar controlando todo.

Griselda: ¡Nunca vengo a la pileta del Faena a tomar sol con pulseras doradas! (muestra las que tiene puesta para la producción fotográfica)... Algo así pasa con la prensa. A veces, ahí tampoco estoy yo, sino lo que se cuenta de mí. Publican cuentos que se parecen a nuestras historias, así como nosotras nos parecemos un poco a las chicas del traje de baño y los vestidos escotados de esta nota...


–¿Se sintieron asediadas cuando se conocieron sus historias con Suar y con Amigorena?

Griselda: Nadie está asediado, excepto Maradona. Hace dos años que puedo decir que tengo un vínculo serio con Adrián. Cuando se supo me sentí expuesta, pero no puedo hablar de sufrimiento, como dicen algunas personas. La mayoría de los que de alguna manera estamos en el espectáculo, más que sufrir, tenemos que agradecer por todo lo bueno que nos pasa.Fueron más de cinco meses de bailar, cantar y actuar, repetir escenas una y otra vez, y armar los perfiles de dos mujeres-amigas que buscan quien las ame como ellas quieren. Y parece que no son la excepción: jueves, viernes y sábados, la sala Pablo Neruda del complejo Paseo La Plaza rebosa de mujeres y hombres que parece estar muy de acuerdo con la propuesta de Corazón idiota. Después de un receso en diciembre, volverán con más funciones en la temporada 2010. “Es un espectáculo muy fuerte, que nos exige mucho físicamente, como todas las excelentes obras que escriben y dirigen Ana Frenkel, Carlos Casella y Daniel Cúparo”, aclara Peterson. “Armamos un equipo compacto, y en cada función actualizamos el lenguaje escénico: si es necesario, cada movimiento y cada línea pueden cambiar”, dice Siciliani


Las dos ya hicieron grandes éxitos de los llamados “comerciales”. ¿Por qué eligieron volver al under?

Griselda: Nadie te asegura nada. Siempre hay que hacer un salto. Después de cada función, sudada y desfigurada, la miro a Carla y a los otros actores (Fernando Tur, Leo Kreimer, Rakhal Herrero y Diego Rosental) y pienso: “¡Qué bueno que hicimos esta obra!”.

Carla: Necesitaba probarme. No quería quedar encasillada, ni esperar el llamado de una productora. Griselda aceptó ser parte del elenco de Revista nacional, obra producida por Adrián Suar, en 2005. Al poco tiempo, el dueño de Pol-ka la invitó a ponerse en la piel de Flor, la secretaria del señor Nielsen, personaje que él interpretaría en la tira Sin código. “Novios, novios, recién hace dos años”, aclara la morocha. La rubia, en cambio, parece obviar las fechas. “Apenas nos estamos conociendo. No puedo ponerle un rótulo a algo que recién empieza”, explica Carla, justificando su intención de hablar más de ella que de Mike Amigorena, su reciente relación, luego de que terminaran Los Pells.


–¿Se imaginaban con parejas mediáticas?

Carla: Yo me convertí en alguien más público de lo que pensaba. Lo que pasó con Mike me sorprendió también a mí. Es muy reciente y todavía no lo puedo descifrar. El viene con su fama y sus cosas, y yo con las mías… No sabemos lo que puede pasar.


–Lo que sí se sabe es que son la pareja del momento…

Carla: Todo eso pasa…


–¿Y Griselda, la primera dama...?

Griselda: ¡Lo detesto! Esos titulares son incómodos, porque en realidad me siento mucho más que un rótulo, una palabra que inmediatamente me relaciona con otra persona. Y encima con Adrián, que no es presidente de nada…


–¿Y qué es Suar para vos?

Griselda: Es un compañero de trabajo del que me enamoré, como la cajera de un banco se puede enamorar del chico del escritorio de al lado


–¿De qué se enamoraron?

Griselda: De lo cotidiano, de lo que compartimos todo el tiempo… Y, según el compañero, con el tiempo decidís si vale la pena bancarse la mochila que carga.

Carla: Hay cosas que todavía prefiero guardar para mí.


–¿Cómo son enamoradas?

Griselda: Mimosas…

Carla: Independientes queda mejor, Gri. Trato de tener una buena relación, de ser lo más cariñosa posible y de estar dispuesta a recibir ese cariño. No me gustaría llegar a mi casa y estar sola, triste y sin alguien con quien compartir las pavadas que me fueron pasando durante el día. Pienso en el futuro, en una familia y esas cosas…


–¿Cómo es Suar en la intimidad de la pareja?

Griselda: ¡Uyyyy! Adri es muy romántico, y yo también soy súper romántica. Además, es muy cariñoso… Pero yo más: soy muy pegotera. Por suerte, nos reímos mucho juntos: le festejo todo lo que dice, y él a mí.


–Veo que el humor es algo que te importa mucho.
Griselda: ¡Totalmente! Creo que el humor y la inteligencia son dos cosas muy importantes que debe tener un hombre para seducirme.
–Y vos, Carla, ¿podés decirnos algo de Mike? ¿Es tal cual se lo ve en la tele?

Carla: Sí, es una persona encantadora. Pero yo soy callada. No me gusta hablar de esto… Todavía me impresiona lo que produjo en la gente que fuéramos pareja… ¡Hasta llegaron a preguntarme si los besos que nos dimos en Los Pells eran de verdad!

–¿Acaso eran de mentira?
Carla: Ja, ja, ja... ¡Claro que eran de mentira

Pero supongo que algo te atrajo de él…
Carla: Mike me gustó cuando lo fui a ver cantar con Ambulancia. ¿Y sabés por qué? Porque no se sabía la letra y fumaba habanos todo el tiempo. Me impactó.


–¿Sueñan con casarse, la fiesta y el vestido blanco?
Griselda: No soy del estilo Susanita. No me interesa el casamiento.
Carla: A mí me gustan las fiestas, pero no me importa una boda. Es que nos casamos tantas veces en las tiras que ya no tiene gracia. ¡La tele nos quitó la fantasía!
Griselda: Enamorada me reconozco igual que cuando tenía 18: soy como una adolescente. Pero los que cambian son los proyectos de vida.

Supongo que quieren tener hijos...

Carla: Sí, sí, sí. Ser madre es algo muy fuerte.
Griselda: Yo quiero tener un hijo, pero no todavía.
Carla: Por eso teníamos que sacarnos las ganas de hacer una obra juntas: para que nos den los tiempos, y después ser mamás. A los cuarenta, capaz que no puedo ni tener un hijo ni me da el cuerpo...
Griselda: ¡Es el reloj biológico! Puede pasar que los planes no salgan tal como los pensamos, pero bueno, al menos lo intentamos… ¡Lo único que te pido, Carla, es que tengamos un hijo al mismo tiempo!


No estoy embarazada ni separada de Mike


Desmiente los rumores que dicen que espera un hijo y de que rompió con su pareja, Mike Amigorena. El sábado terminó las funciones de Corazón idiota junto a Griselda Siciliani. Y está rodando la película El mural, que se filma en la provincia de Buenos Aires con coproducción mexicana.

Camina distendida por Palermo hablando por celular, y cuando ve al cronista se sorprende y defiende: “¿Me vas a preguntar si estoy embarazada? Te aseguro que no. Tampoco me separé de Mike. Seguimos juntos, y muy bien. No creas todo lo que se comenta”, declara Carla Peterson (35), respetuosa del trabajo periodístico.

–¿No piensan tener un hijo?
–Eso es muy íntimo... Si te lo cuento, ¿qué secreto guardo para nuestra pareja?

–¿Seguro que ustedes siguen juntos?
–Claro que sí. Lo único que pido es que nos respeten. Saben que yo no escondo nada. Y si estuviera embarazada lo diría. En la última semana todo el mundo nos hizo la misma pregunta

Amable, pide disculpas y continúa su camino. Del otro lado del teléfono se escucha la voz de Amigorena por el altavoz. Ella lo advierte, y entonces sonríe y cuenta que durante enero compartirán vida y teatro, ya que el próximo 23 él estrenará La noche antes de los bosques en el Complejo La Plaza, sala donde Carla va a estar reestrenando Corazón idiota junto a Griselda Siciliani. “Ahora sólo estoy filmando ‘El mural’, la coproducción argentino-mexicana dirigida por Héctor Olivera, después de dos años intensos de tele, primero con ‘Lalola’ y después con ‘Los exitosos Pells’. Decidí tomarme un merecido descanso, aunque no por mucho tiempo. Quería hacer teatro y cine a la vez”, le confió a GENTE el lunes 30 de noviembre por la mañana, antes de asistir a los premios Clarín, donde está nominada como actriz de comedia y ficción

El martes ya estará en Tandil y Azul para seguir filmado El mural, su primer protagónico en cine, donde se pone en la piel de Blanca Luz Brum, una poeta uruguaya quien vive un apasionado romance con el muralista mexicano David Alfaro Siqueiros.

La historia del film transcurre en los años treinta. Peterson comparte elenco con Luis Machín, Ana Celentano, Sergio Boris, Rodrigo Noya, Juan Palomino, Mónica Galán y el mexicano Bruno Bichir en el personaje de Siqueiros

Antes de despedirse, su teléfono vuelve a sonar.
“Es Mike. ¿Ves que estamos juntos?”, comenta, pícara, en voz baja.

A lo mejor es tan insistente porque quiere confirmar si estás embarazada...
–Ay, basta... ¡Salí de acá! Te prometo que cuando vaya a ser mamá te doy la primicia.

Carla P. en Convicciones





Carla Peterson habló con Convicciones y negó los rumores que afirmaban que junto con Mike Amigorena iban a ser padres... ¡Mirá el video!

domingo, 11 de octubre de 2009

Premios MTV 2009






AMBULANCIA

Teatrisimo 2009






Carla Peterson entrevista AMERICA24

domingo, 4 de octubre de 2009





Cap.1 parte.4

RECUERDOS








Cap.1 parte.3

RECUERDOS






Cap.1 parte.2

RECUERDOS






Cap.1 parte.1

jueves, 10 de septiembre de 2009

Mike Amigorena es el hombre más sexy de la Argentina

Por amplísima mayoría, las lectoras de Pronto.com.ar eligieron a Mike Amigorena como el hombre más sexy de la Argentina. "Me da orgullo que me hayan votado, voy a tratar de no defraudarlas", declaró Mike, en diálogo con este portal. "Creo que hay algo de provocación, de ambiguedad en mí, que seduce". En esta nota, no te pierdas los resultados finales de la encuesta y la entrevista al actor de Los exitosos Pells, quien además, habló sobre su novia, Carla Peterson.

"¡Guau! Me halaga que me hayan elegido y me hago cargo. Uno trata de ser sexy en todo lo que hace", expresó Mike Amigorena en diálogo con Pronto.com.ar, en relación a que las lectoras del sitio lo eligieron, por amplia mayoría, como el hombre más sexy de la Argentina.
"Creo que ser sensual no significa andar en cuero. Hay algo de provocación, de ambiguedad, que seduce. No soy tipo tosco", evaluó el actor, reflexionando sobre sí mismo.
"En la vida le doy importancia a la estética sin ser obsesivo,y también soy de barrio, soy del interior. Hay una mezcla de hombre moderno y a la vez familiar, simple, y eso hace una buena mixtura", señaló Mike. "Siento que a medida que pasa el tiempo fui madurando esa figura, tengo cierto comportamiento suave que se va fortaleciendo durante los años", manifestó.
Mike se mostró contento con el resultado de la encuesta y destacó: "A quienes me eligieron les diría que me da orgullo que me hayan votado, y que voy a tratar de no defraudarlas".
Respecto de su noviazgo con Carla Peterson, no quiso dar detalles, pero aseguró que están muy bien. "Creo que ya está, ya se blanqueó. Estamos muy bien y no digo más nada. Lo que vivimos es algo muy íntimo, y quiero dejarlo así", expresó el actor.


Aquí, los resultados finales de la encuesta:


viernes, 4 de septiembre de 2009

domingo, 23 de agosto de 2009


Carla Peterson habló en el ciclo de Jorge Rial de su relación con Mike Amigorena después de que el actor le confiese su amor en la tv.Por un lado la ex Exitosos Pells dijo que ya sabe todo porque lo vio en la tv y que esta todo bien con Mike, también dijo que el es un hombre piropeador y que la estuvo retando todo el año porque siempre me halagaba y no estudiaba la letra.Por otro lado dijo que lo vió el otro día en un evento y se saludaron bien, y confesó que Mike no sabía mucho su apodo y le soprendio que se acordara.


"CARLA PETERSON
¿Cómo sigue la noche después de ganar tantos premios?-Nos iremos a festejar todos, aunque no sé cómo terminará porque la mayoría están bastantes locos.-¿Lo decís por alguien en particular?-No, lo digo por todos en general. Es la verdad.-Te tomaste con mucho humor todo lo que pasó con Mike Amigorena y sus supuesto amor por vos. ¿Cómo sigue su relación ahora?-A mi no me pareció gracioso. Si a alguien le pareció cómico, que me lo diga.-Pero él sigue diciendo que está enamonamorado-Entoces, ese ya es su problema y ya no puedo hacer nada al respecto. Lo quiero muchisimo a Mike, como quiero a un amigo.-Además, te dedicó el premio y dijo que estabas muy hermosa.-Mike está todo el día piropiando a las mujeres. Durante todo el año, lo escuché diciendo cosas lindas a todas las mujeres, es un verdadero galán."
"MIKE AMIGORENA
-Despues de los Pells, ¿vas a participar de una nueva tira?-¡Nooo! No quiero laburar más, ¡es estrsante! Desde muy chico estuve pensando en este momento, añorando ser famoso, pero ahora prefiero dedicarme a la banda AMBULANCIA. De tele, por ahora basta.-Usás polleras.¿Querés imponer una tendencia?-¡Ojalá! Me encantaría que todos los hombres empezaran a usar polleras y a pintarse las uñas. ¿Cómo empecé a hacerlo yo? ¡Por aburrimiento! Estar al pedo generar ideas.-¿No te importa el qué diran?-¡Para nada! Eso es mentira; todo depende de cómo lo lleves y lo muestres. Lo que digan los demás, me resbala.-Mucho trabajo, ¿Tambien hay amor?-Si. Estoy enamorado de Carla Peterson y ella lo sabe. Igual es un juego entre nosotros, una declaración de amor como vos le harías a Elle McPherson."




"Mike y Carla ENAMORADOS de pies a uñas"


"Comparten hasta el esmalte"


" Mike Amigorena y Carla Peterson, los más buscados por la prensa"


"El encuentro mas esperado - Mesas separadas, cruce de miradas y un saludo ¿amoroso?"






PREMIOS: Los exitosos Pells: 6 premios

Actriz protagónica de comedia: Carla Peterson - Los exitosos Pells (Telefe) - Lalola (America)
Actor protagonista de comedia: Mike Amigorena - Los exitosos Pells (Telefe)


Revlacion: Diego Reinhold (Los exitosos Pells)


Mejor actriz de reparto de comedia: Mirta Busnelli (Los exitosos Pells)


Telecomedia: Los exitosos Pells (Telefe)


Actor de reparto de comedia: Diego Ramos - Los exitosos Pells (Telefe)

sábado, 1 de agosto de 2009

Un total de ocho premios y un broche de Oro convirtieron a los actores, guionistas y directores del programa en los ganadores de mayor euforia de toda la noche en la Rural.
No fue un voto cantado, pero se podía intuir. Lalola, la tira de Dori Media y Underground que el año pasado dio aire fresco a una programación falta de ficción, se llevó su merecido: ocho premios (a los actores, a los guionistas, a los directores) y un broche de Oro. Y, aunque todos ellos ayudaron a construir el gran éxito, puede olfatearse entre esa marea de felicitaciones y felicitados que la gran ganadora fue su protagonista, Carla Peterson.
Es el día después de su gran día y Peterson sale de lo de Mirtha, cita obligada para quienes aún arrastran cansancio y triunfo de la noche anterior. “Todo cambió a partir de Lalola: la serie me ubicó a mí en otro lugar, un lugar muy bueno, claro. Ahora hay que prepararse y saber llevar lo que vendrá”, comenta en los estudios de América. “Igual, sé que tengo que confiar: éste era el salto más difícil y lo logré. Pero no hablo sólo de mí: todo este éxito nos ubicó en otro lugar como actores y eso, para mí, es un gran orgullo. Ojo, pasado el momento de alegría, hay que seguir trabajando, eso lo tengo bien claro.”
Hay una circunstancia que –desde los protagonistas hasta el último técnico– hincha de orgullo a todos los que hicieron la ficción del oro: Lalola se exportó a casi cincuenta países, lo que implica un público potencial de más de mil millones de espectadores. “Aunque vendan el formato y no nuestra tira, creo que tarde o temprano, se va a terminar viendo la versión original”, asegura Peterson. Y sigue: “Porque más allá de que se hagan producciones locales en Estados Unidos, España, Italia, creo que van a chusmear lo que hicimos a través de internet.Nosotros fuimos los creadores del programa, los primeros que les dieron vida a estos personajes. Y, si a mí me mostraron el primer capítulo y ya tenía bastante idea de lo que tenía que hacer, ¡me imagino lo que será para los actores que tengan la posibilidad de ver todos los capítulos! Estoy segura de que vamos a ser un muy buen ejemplo, porque no siempre hace falta tener todas las herramientas para hacer algo de calidad; es más, lo austero puede resultar muy interesante”.
Ahora, el desafío local más grande será repetir el éxito de la mano de Los exitosos Pells, la próxima tira de la productora de Sebastián Ortega. “No sé cuándo va a poder verla la gente, pero nosotros ya empezamos a trabajar. Y, aunque el trabajo de Lalola es una guía importante, esto será una cosa completamente distinta. Va a estar muy divertido, ya lo van a ver”, adelanta la ganadora a mejor actriz de comedia.
Dos que ayer ganaron y que no serán de la partida en el nuevo desafío son Luis Ziembrowski (mejor actor de reparto en comedia) y Violeta Urtizberea (la revelación), que demostró haber heredado el humor de su padre Mex: “Yo les hice un favor a las chicas de Patito Feo. ¡Imaginate si ganaba una, lo mal que se iba a poner la otra! Les ahorré otra pelea a las Populares y las Divinas”, bromeó, pero se arrepintió en seguida: “Ay, ¡no me hagan decir estas cosas!”. Ziembrowski, su compañero de elenco en la tira y en la obra Miami, también se anduvo con humoradas: “¿Para qué me sirve el Martín Fierro? Es muy pesado, así que lo voy a usar de arma, porque ustedes saben: ¡acá el tema es la inseguridad!”.

Las 3 personas MAS TALENTOSAS




viernes, 31 de julio de 2009

7 de agosto en la Trastienda



Ambulancia se presentará a partir de del 7 de agosto, todos los viernes en la Trastienda.Tambien presentaran un CD y un DVD .

sábado, 25 de julio de 2009

viernes, 24 de julio de 2009




Tomas:-Un muchacho como yo
que vive simplemente
confia en los demas
y dice lo que siente
Un muchacho como yo
necesita exactamente
a un chico como tuuuuuuu
DEFINITIVAMENTE.
Martin:-No es el momento de viajar juntos Tomas!
tenesmos que esperar!
Tomas:-¿para cuando joven? ¿para cuando?
¿para cuando joven? ¿para cuando?
Martin:-Eh decidido no viajar contigo a la isla
porque la prensa nos puede descubrir.Y yo tengo una carrera que sostener.!
Tomas:-¿para cuando joven? ¿para cuando?
¿para cuando joven? ¿para cuando?
Martin:-No lo se Tomas, pero todo va a salir como te lo prometi.
Tomas:-Entoces vamos de viaje y vivamos nuestro amor libremente.
Martin:-Te dije que no puedo,ahora no puedo
cualquier cosa me llamas desde alla.
Tomas:-Si te llamo por telefo no me vas a contestar.
Te voy a estar esperando y nose si llegaras.
YO NO QUIERO MEDIO NOVIO!
YO NO QUIERO MEDIO NOVIO!
YO NO QUIERO MEDIO NOVIO!
NOVIO ENTERO QUIERO YOO!
Martin:-Un muchacho como tu que sabe lo que espero
que tiene de verdad las cosas que yo quiero
Un muchacho como yo presisa exactamente un chico como tu
PORQUE ERES DIFERENTE!!




sacado de youtube.com de Ang973.

Fotos de PIAF




Sos el AMOR de MI VIDA


“Es fácil tener muchas mujeres; lo difícil es tener una”


A los 37 le llegó la bendición popular gracias a Los exitosos Pells, que acaba de despedirse con 23,2 puntos de rating. Tras tomarse un mes de descanso, en el que sólo filmó la promoción de Sobe Rush (una nueva bebida energética) y la apertura de Susana Giménez 2009, le contó a GENTE de sus días lejos de la televisión y cerca de la banda Ambulancia, por qué viajó a Mendoza para ver el último capítulo de la tira y cómo anda de amores.
Tranqui, que llego –responde relajado, a las 16.10 del miércoles 15 de julio: datos para que el lector recuerde. En breve revelaremos el porqué...
–Cuidado, que lo aguarda un complicado camino de montaña. Si se retrasa, no nos culpe, eh. –En serio, preguntá sereno que llego –advierte desde su celular el caballero de 1,84 m, 70 kilos y ojos medios castaños–verdosos, a punto de dejar en auto el centro invernal de Las Leñas y virar hacia Maipú, Mendoza, distante 405 kilómetros.
–Revélenos cómo lo esperan allí, en la casa de sus padres (Elsa y Ricardo –Pilucho–). –Con un asadito sobre la parrilla, mis hermanas mayores, Graciela y Lilet, y mis cuñados y sobrinos sentados al costado de la mesa, y el televisor encendido en Telefe.
–¿Lo divierte ver el cierre del ciclo? ¿Lo aborda cierta nostalgia? Confiésese. –Hay muchas ganas de verlo. Se trata de un momento relevante en lo personal. Por eso deseo compartirlo con los míos, a las 22.30, o después de Justo a tiempo (imposta la voz).
Sí: termina Los exitosos Pells y Michael Amigorena (del 30 de marzo de 1972) cumple la palabra empeñada semanas atrás cuando, previo a tomarse un avión y completar el triplete Nueva York–Las Leñas–Maipú, posó frente a GENTE en el Hipódromo de Palermo. “Toco y me voy”, había dicho finalizados las grabaciones y los recitales de su grupo, Ambulancia, en el ND/Ateneo. “Llené la valija y partí agotado”, memora, y “volví bronceado, descansado y feliz”, agrega el cuyano, quien grabó 160 capítulos de los 120 que en principio formarían parte de la ficción humorística de Underground y Endemol, donde interpretaba a los gemelos Martín y Gonzalo... “Aparte de involucrarme en el proyecto desde bastante antes del envío inicial, que salió el 5 de noviembre”, añade pitando un delgado habano, protestando por la escasa participación del jamón en su tostado, tomando un sorbo de espumante café cortado y sosteniendo –detalla a la distancia– la doble página de Espectáculos de La Nación que muestra la promo en cuestión.
–Un gran paso en su historial, entendemos: el público masivo comenzó a registrarlo. –Mirá, en la calle se notó a los quince días de aire. Hasta ese momento, de cada diez personas, dos encontraban en mí una cara conocida. Luego, ponele ocho de cada diez. El ciclo explotó y apareció el reconocimiento, lo que en nada me cambió, precisamente. Salgo cuando siento que puedo bancarme tranqui que se me acerquen. Si no, me quedo en mi departamento alquilado de Almagro y quizá encienda mi viejo televisor de 21 pulgadas, que casi no uso. A menos que camine por la Gran Manzana y una señora me pida posar frente la Estatua de la Libertad, como sucedió (ríe). Allá también me metí en un cine a ver Tetro, la película que filmé a las órdenes de Francis Ford Coppola. Salí rápido, atento a que nadie me descubriera. La fama (larga una carcajada).
–Remóntenos a su génesis en la pantalla chica... –¿Querés que te cuente que moría por El Zorro, Los Dukes de Hazzard, Las calles de San Francisco, el Pato Lucas y el Gato Silvestre, Droopy y Butch, El Increíble Hulk, Los Tres Chiflados y Las Manos Mágicas?
–¿Y qué le representaba ayer y representa hoy la tele? –Un acceso comercial, instructivo, destructivo. Un acceso que necesita de exceso de disciplina. Y yo siempre fui disciplinado, porque me gusta ser indisciplinado. Lógico, si pretendo no hacer nada, primero debo laburar duro.
–¿Buscó triunfar o le daba lo mismo? –Obvio, lo busqué muchísimo. Desde aquel papelito en La familia Benvenuto, allá por 1992, cuando aparecí vestido de cadete, lo he intentado. Al margen, sabía que en algún momento surgiría la posibilidad de mostrar lo mío. Okay, llegó de la mano de los Pells, a mis 37. Pero... Mejor. A un pibe de 20 no le hubiera resultado normal. Le faltan kilómetros. Necesitás digerirlo. Yo gané un Mundial y necesito levantar el pie del acelerador, despejarme. De allí que dejé de lado varias ofertas. Apenas acepté grabar la apertura de Susana y los comerciales de Sobe Rush, la nueva bebida energética de Pepsico (se relame). Me encantó el producto y su estética, pintoresca, moderna, divertida, diferente, original: dos palabras, las ultimas, detrás de las que camina mi carrera. ¡Incluso bailo en el aviso!
–Disculpe que retomemos. ¿Le informaron que a los Mundiales suelen separarlos cuatro temporadas. ¿Regresará recién en 2013? –Buena idea. Sin embargo, no creo. Tal vez en 2010, depende de las propuestas. Entretanto, con Ambulancia (la banda de pop, rock y teatro que conforma junto a sus colegas Muriel Santa Ana, Luciano Bonanno, Julián Vilar y Víctor Malagrino) tocaremos todos los viernes de agosto, a las 23.30, en La Trastienda Club, la previa del cidí y del dividí que lanzaremos.
–¿No terminará abandonando su nutrida trayectoria para dedicarse a la música? –Olvidate. Hace poco, cinco, seis años, que me mantengo gracias a mi profesión. Me gustaría seguir abasteciéndome de ella, aunque no es un sueño. El sueño de mi vida ya lo cumplí: ser actor. Ahora me resta elegir y disfrutar. Lo que me permite no desmotivarme es no planificar.
–¿Ni siquiera en el amor? –Exacto.
–¿Anda solo Mike Amigorena? –Ando solo (sintetiza serio).
–¿Tamaño suceso equivale a un incremento en los acercamientos femeninos? –Suponés bien. Igual, que haya más oportunidades no significa que haya estado con más mujeres a partir del programa. Es fácil tener muchas mujeres; lo difícil es tener una sola...

"Somos como hermanas mellizas"


La primera pregunta en estos reportajes suele ser: ¿cuándo se hicieron amigas? Pero, en realidad, lo que quiero saber es si hablan mucho de sexo entre ustedes. Griselda: (Risas). Somos del tipo de amigas que hablamos de todo.Carla: Hace mucho que hablamos de todo. No con todas las amigas hablás de sexo. Con algunas amigas podés y con otras no.- ¿Qué tiene una amiga de particular para hablar de sexo con ella?Carla: Que tuvo mucho sexo.Griselda: (Risas). Mucha experiencia. Pienso que es como un tipo de confianza, de intimidad. Ella conoce tu historia. Y podés contar la verdad sobre ciertas cosas para que tu amiga entienda cómo te sentís.Griselda: Tenemos la misma profesión, una vida parecida. Si le cuento tal cosa, sé que seguro le pasó, le va a pasar o le está pasando y todavía no lo hablamos. Carla: Nos conocimos en Polka, haciendo de mejores amigas.Griselda: Teníamos que hacer de mejores amigas sin conocernos.- ¿Y se hicieron amigas de verdad?Carla: Sí. Griselda: Nos fuimos enamorando de a poco. Carla: Nos daba miedo pensar qué iba a pasar cuando termináramos de trabajar juntas. Griselda: Pero ya hace mucho que no trabajamos juntas. Carla: Después trabajamos en la misma productora.Griselda: Y teníamos los camarines pegados.Carla: Destino de la vida.Griselda: ¡Gracias a Dios!- ¿Hace cuánto son amigas?Griselda: Desde principios de 2006. ¡Dos años y medio nada más! Lo que pasa es que nos vemos casi todos los días y hablamos todos los días por teléfono.- ¿Cómo hacen para verse casi a diario?Carla: Tenemos un ritmo parecido, el mismo trabajo, vivimos cerca. Uno no tiene un millón de amigos cuando es más grande, al contrario. Tenés 4 o 5 amigos.
- Parecen muy diferentes entre sí...Carla: Somos muy diferentes.Griselda: En realidad no sé en qué somos parecidas. Salvo el humor, que es parecido. Yo soy muy desordenada.Carla: No tiene apego por las cosas materiales. Le regalás flores y las deja ahí, se olvida, se va. Entonces le regalé un florero para que ponga las flores que le mandan. CONTINUA ...http://carlapeterson.ru/entrevistas/ClarinMujer09082008.htm

La rubia sin un pelo de tonta


Carla Peterson nació en una familia acomodada y tradicional que no se mosqueó cuando la nena anunció que quería se actriz. Primero hizo Shakespeare y Kafka en teatro y después saltó a la tele, donde se consagró como la mejor comediante de la pantalla.
Carla Peterson está en un momento brillante, y lo reconoce. Porque esta joven y estudiosa actriz, que se abrió camino escalón por escalón, siente que por fin le llegó el tiempo de la cosecha. Llegó, como suele suceder, después de aprender a morder el polvo de la profesión de actriz, a ser estrella, pero que siempre implica renunciamientos. Así parió a la excepcional comediante que se puede admirar a diario en TV. Cuando ya quedan pocos capítulos para terminar con Los exitosos Pells, nos recibe en su camarín, olvida el cansancio del rodaje diario y se entrega a una charla donde, con honestidad brutal, abre su corazón y su intimidad.
–Muchos actores reconocen haber elegido su profesión para evadir una realidad poco gratificante. No parece ser su caso.–No tanto porque cuando yo decía que quería ser actriz era muy chica: no sabía muy bien cuál era la realidad, ni tampoco cómo era la vida de un actor o qué significaba ser actriz. Pero sí imaginaba que serlo me iba a dar más posibilidades de vivir de manera diferente. Y además, al mismo tiempo que yo decía que quería ser actriz vivía una realidad que era casi un juego, en plena adolescencia.
–Fue una nena precoz. A los 8 años ya hacía su espectáculo de zapateo americano en el living de su casa. –Hacía esas cosas, no sabía si iba a ser una bailarina o actriz, pero sí estaba segura de que iba a estar entre vestuarios y escenografías, soñaba con eso.
–Parafraseando al tango, se educó en un colegio de monjas… –Fui doce años al colegio Santa Unión, que había sido de monjas inglesas o escocesas. Tenía todo lo que un colegio inglés podía ofrecer, pero no lo era. Eso sí, había un costado artístico muy interesante y la libertad de plantear y concretar obras y musicales: hice de Gene Kelly en Cantando bajo la lluvia, participé en La novicia rebelde, y me recibí de bachiller humanista especializada en letras. Fue una etapa muy divertida.
–¿Y sus padres qué opinaban?–Se preguntaban si en este país era posible vivir de la profesión de actriz, más después de haberme mandado a tan buenos colegios. Por suerte me gustaba estudiar, porque después me di cuenta de la cantidad de horas de estudio que lleva este trabajo, y ni hablar del teatro…
–Tiene toda una trayectoria en el off. –Sí, al mismo tiempo que hacía tele, y creo que eso me dio más posibilidades. También tuve un muy buen maestro y un muy buen grupo de experimentación. Formar parte de una compañía de teatro, estar rodeada de gente inteligente y generosa, siempre es enriquecedor: se van aprendiendo las diferentes técnicas con actores que trabajan hace muchos años, hasta encontrar la propia. Después de haber trabajado con textos clásicos se hace más fácil encarar una escena de TV, se le pierde el miedo al libreto.
–¿Cuándo hizo su primer casting?–A los 19 o 20 años. No quedé, seguí estudiando teatro, y después me llamaron.
–¿Son crueles los castings?–Sí, pero todo es cruel, salir a buscar trabajo a los 19 años también es cruel. No lo tomaba así, sino como una prueba personal, y encima me pagaban. Yo vivía con mis padres, no tenía esa necesidad, pero sí quería encontrar un lugar de crecimiento y desarrollo de ese deseo que apareció muy temprano en mí.
–¿Fue a estudiar al exterior?–Me fui dos años a EE.UU. a estudiar danza, que era lo que en ese momento más me atraía. Salía del colegio y me iba a tomar clases de baile: jazz, clásico, zapateo americano, todo para preparar mi cuerpo para bailar. Había visto Fama toda mi vida, cómo no me iba a ir a tomar una clase en Broadway y ver cómo era. Terminé el colegio, y lo organicé como un viaje de estudios. Me fui sola.


Carla en lo de Mirtha.

Sos una DIOOOOOSA

Esa sonrisa HERMOSA :)

Michael Amigorena nació en Maipú, Mendoza, el 30 de mayo de 1972, de ascendencia italiana por parte materna y vasca por parte paterna,[2] tiene dos hermanas mayores: Graciela y Lilet.[3] Fue un niño problemático, repitió tres veces cuarto año de la escuela secundaria y fue expulsado de varios colegios.[4]
En el año 1992, a los 19 años y en búsqueda de un futuro como actor, se estableció en una casa de inquilinato de Buenos Aires y para mantenerse comenzó a realizar diversos trabajos, entre ellos repartidor de pizzas, telemarketer, cadete, promotor y modelo.[5]
Estudió teatro con Santiago Doria pero abandonó una vez culminado el primer año. A mediados de los ‘90 recomenzó sus estudios, esta vez con Alfredo Zemma en la escuela de la Asociación Argentina de Actores y posteriormente tomó clases de clown, bufón y máscara neutra con Cristina Moreira. En el año 1998 realiza su primer trabajo como actor en la obra Despertar de primavera, de Frank Wedekind.[6]
Dice que siempre le gustó actuar, desde que era niño le ponía voces a los muñecos o imitaba a personajes. Reconoce que nunca le gustó estudiar, pero dice que de haberlo hecho habría sido médico forense porque le fascina la anatomía. Tiene una banda, llamada "Ambulancia" junto a Victor Malagrino, Luciano Bonnano, Muriel Santa Ana, Mariano Torre, Julián Vilar y el productor Segio D'angelo. Hacen covers y también temas propios, Mike canta vestido de mujer. Se presentan los viernes a la medianoche en Velma Café. Fue elegido por el director Francis Ford Coppola para grabar "Tetro" una película realizada en Argentina con muchos actores argentinos como Leticia Brédice y Sofía Gala, entre otros.

Carla Constanza Peterson hija de un instructor de Aviación y una abogada, nació en la ciudad argentina de Córdoba, capital de la provincia de igual nombre, el 6 de abril de 1974, y allí vivió los 3 primeros años de su vida. Descendiente de suecos por su padre, y de italianos por su madre,[1] es la mayor de 3 hermanos y desde chica supo que quería ser actriz.
Reconoce al director Miguel Guerberof como su maestro; él apuntaló su formación en el teatro clásico y la dirigió en varias obras de Shakespeare (Cuento de invierno, Para todos los gustos, Todo está bien si termina bien y también en la versión de El Castillo, de Kafka). A los 18 años de edad se mudó un par de meses a Nueva York y a Los Ángeles a tomar clases de danza. Dos años más tarde se presentó en un casting de televisión y fue elegida para participar en Montaña rusa, la tira dedicada a un público adolescente.
El trabajo actoral de Carla Peterson se caracteriza por versatilidad: puede representar roles trágicos o, por lo contrario, a personajes de humor cómico. En Sos mi vida se destacó en su rol de "Constanza", el personaje de contrapunto del protagónico de Natalia Oreiro.[2]
Luego de dicha interpretación alcanzó el rol protagónico de la serie Lalola, donde encarnó a un hombre machista dedicado a la publicidad transferido al cuerpo de una hermosa mujer, teniéndo que afrontar el mundo desde una nueva perspectiva. Esta serie revolucionó las novelas de habla hispana generando un éxito en los países donde fue transmitida e incentivando el lanzamiento de nuevas versiones basadas en la original, por ejemplo en España y Chile.Y luego realizo Los Exitosos Pells junto a Michael Amigorena.

Despedidaaaa (!






Sebastian Ortega

Hugo Arana

Mike Amigorena (L)

Carla Peterson (L)

Andrea Bonelli

Lucrecia Blanco

sábado, 13 de junio de 2009










Loooooooooo amo
hoooy de nuevooo 13/6
eeeeen el ND ATENEOOO

viernes, 12 de junio de 2009





Ambulaaaaaaancia THE BEST

El exitoso señor Pells, Mike Amigorena y su banda, Ambulancia, dieron un show excelente en Ciudad Cultural Konex, que combinó música y performance teatral. En el repertorio, brilló una versión spinetiana y desopilante del tema “Raquel”, de Los Auténticos Decadentes.

Quizá porque son actores y porque nadie los juzga demasiado como músicos, los seis miembros de Ambulancia, la banda que lidera Mike Amigorena, están en condiciones de tomarse todas las libertades que quieran a la hora de tocar una canción (e incluso personificarse como una azafata de Lufthansa, como bromeó en una entrevista con Terra).
Esa impunidad positiva genera combinaciones muy bien logradas en el repertorio del grupo, como una versión spinetiana y melancólica de “Raquel”, el tema fiestero de Los Auténticos Decadentes; o un cover de Alanis Morrisette enganchado con el famoso “Pump up the jam”, de Technotronic, y con “Prófugos”, de Soda Stereo. Todo en el mismo envase, sin anestesia.
El desenfado es la ley que manda arriba del escenario. Eso queda claro para todos los que se acercan a Ciudad Cultural Konex a ver y escuchar a Ambulancia.
Mike Amigorena (famoso por su protagónico en la serie de tevé “Los exitosos Pells”), Muriel Santa Ana, Mariano Torre, Luciano Bonnano, Julián Vilar y Víctor Malarino están en la otra orilla del supuesto acartonamiento que supone enfrentarse a un auditorio repleto. Cantan, bailan, cambian instrumentos como si fueran tomates y se divierten a lo grande. El hecho de que todos sean actores les confiere el privilegio de convertir la música en banda de sonido de lo que hacen sobre las tablas, aunque las canciones también tienen peso propio.
Algunos temas de Ambulancia, en vivo:
“Trigal”“Raquel”“Earth Angel”
A partir de esa lógica, de aceptar que todo está permitido, los temas son deconstruidos, deformados, adulterados, maniatados y liberados sin complejos. Amigorena juega a ser una mezcla de noble travestido con azafata sexy, gobernanta inglesa y David Bowie en su época de Ziggy Stardust. Con su tono grave, ensambla muy bien las voces con Muriel, la única mujer del grupo, una auténtica revelación en el canto.
En ese clima de “terreno liberado” transcurren las canciones. Al clásico “Trigal”, de Sandro, le sigue un tema insuperablemente ochentoso, “I just wanna use your love tonight”, de The Outfield, en el que los dos guitarristas (Julián Vilar y Luciano Bonanno) se ponen espalda contra espalda como un dúo metalero y Muriel cabalga al mejor estilo de un western clase Z.
En “Raquel”, de los Decadentes, Muriel juega embobada con una rueda para hamsters. Luego llegan canciones de Alanis Morrisette, Technotronic y Soda Stereo, que han sido destripadas y vueltas a armar de pies a cabeza.
Pero uno de los momentos más divertidos de la noche es cuando arrancan con una suerte de cumbia electrónica que termina con el baterista, Mariano Torre, bailando axé bahiano. “Volvé a tu lugar”, lo intima Mike con su vozarrón de pocos amigos, antes de inaugurar una versión cool de “Tainted Love”, el tema que popularizó Marilyn Manson.
Más cerca del final del show, una versión -primero suave, luego explosiva- de “Boys don´t cry”, de The Cure, lleva el repertorio a lo más alto; Víctor toca el teclado con la lengua al mejor estilo Gene Simmons y Mike ensaya su swing usando el micrófono como un palo de golf.
El show cierra con un funk rabioso y una versión rapeada, con flashes flamencos, del tema de Julio Iglesias “Me olvidé de vivir”, en el que Muriel echa mano a las castañuelas mientras Mike y Mariano se trenzan en una batalla de raperos inadaptados. Cuando los integrantes de Ambulancia finalmente saludan al público con la clásica reverencia de los actores, no se sabe demasiado bien si uno ha estado viendo un recital o una obra de teatro. “Ambulancia es un viaje para mirar música”, dicen sus integrantes. En esa ambigüedad está el buen gusto.






-Cuando uno ve El Niño Argentino piensa dos cosas. Por un lado, “qué buena la actuación del Niño” y por otro lado, “¿quién es?”. Bueno, ¿quién sos?
-Soy un actor de varieté, desde que nací.
-¿Por qué desde que naciste?
-Porque toda la vida compuse. De chico jugaba solo. Tengo hermanas grandes,entonces no me quedaba otra que jugar en mi mundo. Y eso hacía que fuera explorando las capacidades que tenía. Como soy muy curioso, exploraba qué podía llegar a hacer con la voz, con el cuerpo, con la cabeza. Era meramente un juego. Y a medida que fue pasando el tiempo, me di cuenta… me fui viendo actor. No es exactamente que me di cuenta, sino que siempre lo tuve incorporado, desde chiquito. Con eso no te quiero decir que llevo el teatro en el alma. No. Soy una persona cómoda. Fui un pésimo alumno, no me gustaba estudiar. No se me daba por leer, sino que hacía cosas que se me tornaban fáciles, como la creación. Y decidí venirme a Buenos Aires, en 1992, para estudiar teatro, para ser actor. Desde entonces hasta que lo logré, pasaron muchas cosas, muchísimas cosas…
-¿Cuál es tu formación?
-Empecé con Santiago Doria. Estudié con él un año. Después, como soy cómodo, no seguí. Yo pensaba que me iban a golpear la puerta de mi casa… Con el tiempo te das cuenta de que tenés que prepararte. Hay cosas que uno trae y otras que hay que pulir, si no, no sirven de nada. Así que volví a estudiar, en este caso con Alfredo Zemma, en la Escuela de la Asociación Argentina de Actores, en la calle México.
-Yo también pasé por ahí. La Escuela funcionó durante los primeros años de la década del 90, pero inexplicablemente fue cerrada por la dirección, a pesar de su buen funcionamiento. No conozco a nadie que haya estudiado ahí. Es como una escuela fantasma.
¿En qué año estuviste allí?
-En el 94, 95. Estaba buena la escuela. También había circo.
-¿Y qué hacías ahí? ¿Stanislavsky?
-No, no. No estudié nunca a Stanislavsky. La formación ahí era más ecléctica. Después me dormí como dos años. No hice nada… Paralelamente hacía castings para publicidades, algún que otro desfile… Fui modelo… Y a partir del 98 empecé a trabajar. Antes tomé clases con Cristina Moreira: clown, bufón, máscara neutra. Empecé a hacer seminarios y workshops con Alejandro Catalán, Joy Morris. Las últimas clases que tomé fueron unos seminarios de Augusto Fernándes y Fernando Piernas.
-Eso es realmente strasberiano…. Mucha silla… Conociéndote como actor, no te imagino trabajando con esa técnica…
- No creas que me gusta siempre hacer reír. El Niño Argentino mismo, no es solamente una comedia.
-No lo digo por eso, sino por la inmovilidad que propone esa técnica, en la que todo pasa por la cabeza, el pensamiento…
-Sí. Es que si vos siempre hacés lo que te sale, te aburrís. Y no sólo eso, sino que te enviciás. Si yo hago lo que mejor sé hacer, me lavo, no se enriquece mi trabajo. Entonces voy a terrenos adonde me cuesta, en los que realmente te das cuenta que actuar bien es una cosa muy difícil. Te sale de a ratos. Actuar es eso que te sale por momentos.
-Y en televisión eso es más evidente…
-En televisión no sabés qué hacés… Más en una tira diaria, donde el guión, en general, es pobre, es un reciclaje de cosas, de rellenos. No se le da el tiempo ni la calidad de un unitario. Entonces, si no improvisás, te morís, te agotás. Para la televisión tenés que bajarte un programita para no intoxicarte de virus. Tenés que desarrollar inmunidad a muchas cosas. Si no, no podés hacer televisión acá…En teatro es otra cosa.
-¿Qué hiciste en teatro?
-En el ’98, lo primero que hice fue Despertar de primavera, de Frank Wedekind. Y a partir de ahí, no paré de trabajar. Con baches de tres meses, perdiendo tiempo… Después volvía. Me pasé toda una vida perdiendo tiempo. Acá no te estoy contando nada. ¡Si te contara los garrones…! Como era chico, me la bancaba, pero cuando vas sumando años…Aunque la vida es consecuente con lo que vas haciendo. A medida que te vas haciendo grande, vas padeciendo menos. Estás más fuerte, es otra cosa. A los diecinueve todo es nuevo. Podía no comer, dormía en una pensión cerca de Plaza San Martín…
-¿Y después?
-En teatro hice Payasos Imperiales, cuando estudiaba con Cristina Moreira. Después, un absurdo, Verídicamente opaco, sin pena ni gloria, pero estaba bueno el personaje. En el 2002, los sonetos de Shakespeare, con Guido D'Alvo y Vanesa Miller, con la dirección de Mónica Maffia. Después de eso, entré al programa Viva la diferencia, haciendo un personaje. Hacíamos vivos, sketches… un desastre. Después hice La cajita social show, con los Borenstein. Hice Tiempo Final, Ricos y Famosos, muchas cosas…. Gasoleros, Cuatro Amigas… ya no me acuerdo.
-En teatro hacés Shakespeare comprimido en el 2004…
-Antes hago Todos tenemos problemas sexuales, en la Trastienda. Después, teatro semimontado, en el Regina. Y después Shakespeare comprimido. Además formé una banda, Ambulancia, porque también soy cantante. Somos un grupo de actores que simulamos ser una banda. Es un espectáculo muy particular… Tomamos canciones clásicas y les cambiamos el género. Ponemos nuestra música. Y entre tema y tema hay situaciones muy sutiles. En el 2005 no hice teatro, hice televisión: Una familia especial, Sin códigos, La niñera, Casados con hijos, Quién es el jefe… Y después, El niño argentino.
-¿Y cómo llegás a El niño argentino? Se rumorea que a través de un casting.
-Mauricio Kartun hizo una audición. A mí me conocía a través de un video de Shakespeare comprimido y me llamó. Había que estudiarse parte de la obra, en verso. Jamás había hecho verso. Solamente en una audición con Jorge Lavelli, para La hija del aire, de Calderón de la Barca. Había que representar una parte leída y otra actuada. Nunca me imaginé que iba a quedar. No me mataba la idea… Cuando me mata algo, me pongo más nervioso… Lo hice y Kartun me lo confirmó a la semana. Fue una sorpresa. Yo me había olvidado.
-¿Ensayaron mucho?
-Siete meses. Desde noviembre de 2005. Estrenamos en julio de este año.
-¿Cómo construiste el personaje? Porque además de la dificultad del texto, es notable cómo aprovechás todo lo que le es periférico. En un momento el Niño lo dice: todo ese “entrenamiento en lo inútil”… ¿Llegaste a esa concepción del personaje por una facilidad propia o porque Kartun te lo propuso?
-Eso es creación colectiva. Todo lo que viste es creación de ambos. Algunas cosas salieron a partir de algo que él pedía, otras a partir de algo que yo proponía y él me decía “¡eso hacélo!”. Tirás quince y quedan dos. Kartun es una persona muy abierta, muy abierta. No te coarta…
-No defiende el texto a rajatablas…
-Sí que lo defiende, pero es abierto… Siempre y cuando acompañes al texto, acepta las propuestas. Tiene mucho sentido común.
Durante muchos años, la actuación culta era la capacidad del “buen decir”. Paralelamente, la actuación popular se apoyaba en la imitación de acentos extranjeros para producir comicidad. Con el ingreso de las técnicas modernas de actuación, basadas en la vivencia y luego relevadas por una preeminencia del cuerpo, el manejo de la palabra quedó considerablemente relegado. Eso se padece aun hoy, no sólo cuando no se entiende o no se escucha lo que los actores dicen, sino cuando no se aprovechan las posibilidades expresivas, plásticas y musicales de la voz y la palabra. Por ejemplo, en la puesta que mencionabas anteriormente, La hija del aire, se evidenciaba notoriamente la diferencia existente entre los actores españoles y los argentinos, siempre en detrimento de estos últimos. El tratamiento del verso en El Niño Argentino consigue recuperar esta pericia en el manejo de la palabra que parecía perdida. Vos contás que nunca trabajaste con verso. Sin embargo, en el espectáculo lo dicen de una manera tan natural, que el espectador entra, se olvida de que la obra está escrita de esa manera…
-Es que se te convierte en prosa, a fuerza de repetición. Nosotros, al principio, lo leíamos muy pausado. Pero es mucho más rápido. Tuvimos que romper con la cadencia, la musicalidad del verso decadentista, al que nosotros conocemos por el género gauchesco, las payadas. Antes había hasta radioteatro en verso. Primero tuvimos que estudiar todo ese texto de memoria y después, todo es práctica. La misma vida es práctica.
-¿Trabajaron directamente con el texto, no improvisaron?
-No. Improvisábamos acciones, pero con el texto.
-La obra recurre a géneros teatrales del pasado argentino. ¿Se documentaron?
-Mauricio es un tipo muy culto. No conozco un investigador tan riguroso. De ahí esa terminología, esos acontecimientos, conocidos como si fuesen actuales. El tipo indaga, investiga. Y así uno aprende, todo el tiempo. El tipo caía con fotos: “mirá, acá está el Niño, acá está el Muchacho. Ese sería el barco y ese sería el Oso Carolina”. Yo soy un ignorante. Soy una persona que no leo. Mis conocimientos son intuitivos. Me gusta hacer muchísimas cosas, pero me considero un ignorante. Entonces no hacía otra cosa que aprender. Mauricio debe haber aprendido conmigo de alguna manera algo, seguro… Pero yo me la pasé aprendiendo.
-Creo que El Niño Argentino es la mejor obra de este año, en tanto es una totalidad, donde lo formal y lo semántico no se excluyen, donde todos los elementos descuellan.
-Es una obra muy completa. Una gran comunión. En la vida tenés momentos como éstos, que no son muy frecuentes. Podés hacer obras copadas, llevarte bien. Pero en este caso, hay una gran comunión, donde justo para cada cosa está lo mejor, donde todo está en el momento más apropiado. No sé si “mejor” es la palabra que lo describe con más exactitud, pero es oportuna. No sé si somos los mejores todos, pero hay una poesía en todo. En la iluminación, la escenografía, los objetos y las relaciones de esas cuatro personas. Sería bueno que la obra continuara, que fuera a festivales. Me parece que es una pieza en la que recién estamos en el melón con jamón.
-Trata temas muy nuestros, que ahora no se valorizan, que están como borrados en nuestro teatro...
-Es característico en Mauricio hablar de la Argentina, de todo lo que esté vinculado, no a lo clásico, sino a lo popular. El es un investigador nacional. Habla de la Argentina, de lo rústico.
-¿Y no pensás que eso la convierte en una obra demasiado local?
-Es localista. Pero no deja de ser un entretenimiento. Algo siempre se entiende, aunque sea por dónde va la cosa. Es como si viniera acá un teatro japonés. Se te van a escapar un montón de cosas, pero no deja de ser un intercambio cultural, y está bueno
-No sé si incluso la gente de acá la entendió completamente.
-Sin ir más lejos, yo la entendí a medida que la fui haciendo. Ésta es una obra que habla del pasado. Quizá las personas más grandes van a aprovechar las sutilezas mucho más que nosotros. Porque hay terminología y marcas de otra época. Yo no conocía las costumbres, el trato de la aristocracia hacia su prole, que la plata salía del escritorio, que no estaba bien visto trabajar. Y mucha gente más joven no lo sabe, tampoco, a menos que sea lectora, que conozca la historia argentina.
-La historia del teatro también...
-Claro... El vodevil, la comedia, el teatro de balneario, todo lo que era el varieté... Eso que justifica todo lo que el Niño hace. Bueno, yo creo que siempre hay algo que no se entiende. Siempre. Hay algo que quizá ralenta el ritmo de la obra, porque es muy progresivo lo que se cuenta. El Niño Argentino era una obra mucho más larga. Pero muchísimo más larga.
-A mí me encanta la obra y la disfruto, pero mucha gente objeta la duración.
-Bueno, imaginate que iba a durar dos horas y cuarto, dos horas veinte. De todo el material, no sabés lo que Mauricio, con todo el dolor, sacó. ¡No sabés lo que yo hacía con El Niño...! El ascenso del Peón y la decadencia del Niño eran más progresivos, más paulatinos Se mencionaba mucho más la historia argentina. Había más perversión. La pelea, por ejemplo, duraba mucho más. Una lástima.
-¿Y el recurso a la vulgaridad, otra cosa que algunos reprochan?
-Eso es ignorancia... No se puede negar la calidad de un texto que está trabajado así... Lo interesante es que la vulgaridad esta asociada al conocimiento, al poder. Porque el Peón es naturaleza, es tierra, no conoce la traición, tiene valores, no sabe como ser vulgar.
-¿Cómo te llevás con el hecho de ingresar al teatro oficial y que gente que no te conocía, te conozca?
-Cero. Me gusta que mi trabajo sea reconocido y que me conozca más gente. Me gusta. Y lo que hago es para que lo conozca la gente y lo disfrute. Pero también es una consecuencia. Es una consecuencia de mucho tiempo de trabajo. Todo ha sido muy paulatino en mi carrera. Es solamente una consecuencia el hecho de que yo trabaje en el Teatro San Martín, un lugar al que fui a audicionar y a dejar material no sé cuantas veces y nunca me llamaron. Está bueno, está bueno, pero no me jacto de eso.
-¿Y con el reconocimiento de la crítica?
-Me enorgullece y me encanta. Pero no me duermo. Hay más todavía. Los éxitos hay que disfrutarlos sólo mediante la vida útil que tienen. Si te quedás en eso, se les va el brillo.